Perfil profesional ideal del DirCom
27.10.2015 17:39
En la actualidad, buena parte de los dircoms provienen del campo del Periodismo, de las Relaciones Públicas o de ámbitos formativos y de experiencia profesional diversos, dado que, hasta hace pocos años, la función comunicativa todavía era considerada por CEOs, directivos de Recursos Humanos y headhunters una simple función emisora de mensajes persuasivos dirigidos a audiencias amplias y no segmentadas con criterios de stakeholders. Por este motivo, la función del dircom sólo preveía, básicamente, la emisión de mensajes a través del único canal de los medios de comunicación social y, de hecho, era concebida como un tipo de gabinete de prensa interno.
Fruto de la evolución que ha experimentado en las últimas décadas tanto la posición del dircom cómo de sus funciones, los directivos de Comunicación Corporativa tienen que ser profesionales con formación superior que a su formación específica de origen sumen, por un lado, una sólida base de formación directiva y de gestión en el área de la Dirección general, y, de otro, el conocimiento y la formación específicos orientados a la adquisición de competencias en las técnicas y las herramientas de la Comunicación y de las Relaciones Públicas Corporativas y de la Publicidad. De manera específica, en los ámbitos de Estrategia, Comunicación Estratégica, Lobbying, Public Affairs, Issues Management, Publicity y Relación con los Medios de comunicación, Protocolo, Mecenazgo, Fundrising, Comunicación de Crisis, Comunicación Interna, Formación de Portavoces, Creación de Acontecimientos, Patrocinio o Comunicación de la RSC.
Por tanto, un dircom tiene que respnder al siguiente perfil profesional tal y como publica la asociación Dircom en su decálogo:
Formación y experiencia económica y empresarial: Para comprender perfectamente las dinámicas empresariales y alinear los objetivos de comunicación a los objetivos de negocio, el dircom tiene que tener conocimientos de economía, de contabilidad, de empresa, y específicamente, por lo tanto, tiene que estar formado en management, gestión económica y gestión empresarial. Tiene que tener experiencia en tareas directivas y de gestión. En este sentido, tendrá que ser capaz de diseñar planes estratégicos y de organizar, dirigir y controlar las acciones comunicativas de su organización, asignar y administrar presupuestos, evaluar el ROI de sus intervenciones profesionales y gestionar equipos.
Formación y experiencia en investigación social: Para diagnosticar de forma precisa los problemas de comuni cación generados entre los stakeholders y marcar los objetivos oportunos que hay que lograr dentro de los planes estratégicos de comunicación que diseñará, el dircom tendrá que estar familiarizado con sofisticados métodos y técnicas de investigación social aplicada para poder encargar e interpretar los resultados de las auditorías de comunicación más adecuadas.
Formación y experiencia en el sector de la Comunicación Corporativa y de la Publicidad: El dircom tiene que ser un especialista en intangibles. Por eso, por un lado, tiene que conocer en cantidad suficiente el mundo de la Comunicación de Marketing (de productos/servicios), para ayudar a lograr los objetivos de posicionamiento de la marca mediante las técnicas de la comunicación persuasiva como por ejemplo la Publicidad Convencional y todas las modalidades de la Publicidad no Convencional. Por el otro, tiene que conocer en profundidad la Comunicación y las Relaciones Públicas Corporativas, para conseguir hacer realidad los objetivos de notoriedad y de imagen y de reputación corporativas, haciendo uso de las técnicas de la Comunicación de Influencia. También tiene que comprender qué papel juegan los mass media tradicionales y los de nuevo formato online.
Habilidades personales: Un dircom tiene que estar dotado en el mundo de la comuncación, tanto escrita como interpersonal; tener visión estratégica; ser accesible a los stakeholders y a los medios de comunicación, y tener capacidad de influencia (liderazgo) sobre la alta dirección de las organizaciones y sus homólogos funcionales, a los que tendrá que asesorar de forma permanente en materia de comunicación a nivel staff. También serán indispensables otras cualidades personales, como la capacidad de conducción de equipos de trabajo, tener flexibilidad para adaptarse a los cambios, hacer frente a los retos con actitud positiva y creativa, tener un espíritu proactivo y resolutivo, con una fuerte capacidad de análisis y de síntesis para diagnosticar certeramente situaciones complejas. Ser convincente, persuasivo, empático y excelente negociador (capacidad retórica), con inteligencia emocional contrastada y capacidad relacional muy alta será de gran ayuda para actuar como mediador entre su organización y sus públicos clave. Hay que valorar también una clara vocación de formación continuada.
Se calcula que dentro de diez años, esta figura integradora de la comunicación de la empresa, acabará convirtiéndose en uno más de los directivos. Su futuro irá aparejado, además a nuevos retos a los que hacer frente: la microcomunicación se impondrá a la comunicación de masas, la gestión de cantidades ingentes de información, la irrupción de múltiples fuentes informativas, los nuevos retos de la comunicación interna…Para las agencias especializadas será un reto ofrecerles nuevas soluciones en consultoría estratégica, innovación, anticipación en tendencias en comunicación, gestión de reputación offline y online, servicios diferenciadores y creatividad.
Fruto de la evolución que ha experimentado en las últimas décadas tanto la posición del dircom cómo de sus funciones, los directivos de Comunicación Corporativa tienen que ser profesionales con formación superior que a su formación específica de origen sumen, por un lado, una sólida base de formación directiva y de gestión en el área de la Dirección general, y, de otro, el conocimiento y la formación específicos orientados a la adquisición de competencias en las técnicas y las herramientas de la Comunicación y de las Relaciones Públicas Corporativas y de la Publicidad. De manera específica, en los ámbitos de Estrategia, Comunicación Estratégica, Lobbying, Public Affairs, Issues Management, Publicity y Relación con los Medios de comunicación, Protocolo, Mecenazgo, Fundrising, Comunicación de Crisis, Comunicación Interna, Formación de Portavoces, Creación de Acontecimientos, Patrocinio o Comunicación de la RSC.
Por tanto, un dircom tiene que respnder al siguiente perfil profesional tal y como publica la asociación Dircom en su decálogo:
Formación y experiencia económica y empresarial: Para comprender perfectamente las dinámicas empresariales y alinear los objetivos de comunicación a los objetivos de negocio, el dircom tiene que tener conocimientos de economía, de contabilidad, de empresa, y específicamente, por lo tanto, tiene que estar formado en management, gestión económica y gestión empresarial. Tiene que tener experiencia en tareas directivas y de gestión. En este sentido, tendrá que ser capaz de diseñar planes estratégicos y de organizar, dirigir y controlar las acciones comunicativas de su organización, asignar y administrar presupuestos, evaluar el ROI de sus intervenciones profesionales y gestionar equipos.
Formación y experiencia en investigación social: Para diagnosticar de forma precisa los problemas de comuni cación generados entre los stakeholders y marcar los objetivos oportunos que hay que lograr dentro de los planes estratégicos de comunicación que diseñará, el dircom tendrá que estar familiarizado con sofisticados métodos y técnicas de investigación social aplicada para poder encargar e interpretar los resultados de las auditorías de comunicación más adecuadas.
Formación y experiencia en el sector de la Comunicación Corporativa y de la Publicidad: El dircom tiene que ser un especialista en intangibles. Por eso, por un lado, tiene que conocer en cantidad suficiente el mundo de la Comunicación de Marketing (de productos/servicios), para ayudar a lograr los objetivos de posicionamiento de la marca mediante las técnicas de la comunicación persuasiva como por ejemplo la Publicidad Convencional y todas las modalidades de la Publicidad no Convencional. Por el otro, tiene que conocer en profundidad la Comunicación y las Relaciones Públicas Corporativas, para conseguir hacer realidad los objetivos de notoriedad y de imagen y de reputación corporativas, haciendo uso de las técnicas de la Comunicación de Influencia. También tiene que comprender qué papel juegan los mass media tradicionales y los de nuevo formato online.
Habilidades personales: Un dircom tiene que estar dotado en el mundo de la comuncación, tanto escrita como interpersonal; tener visión estratégica; ser accesible a los stakeholders y a los medios de comunicación, y tener capacidad de influencia (liderazgo) sobre la alta dirección de las organizaciones y sus homólogos funcionales, a los que tendrá que asesorar de forma permanente en materia de comunicación a nivel staff. También serán indispensables otras cualidades personales, como la capacidad de conducción de equipos de trabajo, tener flexibilidad para adaptarse a los cambios, hacer frente a los retos con actitud positiva y creativa, tener un espíritu proactivo y resolutivo, con una fuerte capacidad de análisis y de síntesis para diagnosticar certeramente situaciones complejas. Ser convincente, persuasivo, empático y excelente negociador (capacidad retórica), con inteligencia emocional contrastada y capacidad relacional muy alta será de gran ayuda para actuar como mediador entre su organización y sus públicos clave. Hay que valorar también una clara vocación de formación continuada.
Se calcula que dentro de diez años, esta figura integradora de la comunicación de la empresa, acabará convirtiéndose en uno más de los directivos. Su futuro irá aparejado, además a nuevos retos a los que hacer frente: la microcomunicación se impondrá a la comunicación de masas, la gestión de cantidades ingentes de información, la irrupción de múltiples fuentes informativas, los nuevos retos de la comunicación interna…Para las agencias especializadas será un reto ofrecerles nuevas soluciones en consultoría estratégica, innovación, anticipación en tendencias en comunicación, gestión de reputación offline y online, servicios diferenciadores y creatividad.